Para poder atender a nuestros propios pensamientos los seres humanos hemos desarrollado una capacidad mental, conocida como conciencia metacognitiva.
La conciencia metacognitiva tiene que ver con ser capaces de atender a nuestros propios pensamientos.
- Fuente: Manual de técnicas de intervención cognitivo-conductuales, biblioteca de Psicología.
¿Para qué nos sirve la conciencia metacognitiva y cómo influye en nuestro bienestar?
La habilidad metacognitiva se utiliza para detectar aquellos pensamientos que podíamos calificar de indeseables y, una vez que somos conscientes de ellos, podamos elegir una respuesta más adecuada.
Esta capacidad es bien conocida por la psicología académica y es un componente muy usado en los tratamientos terapéuticos convencionales. Por ejemplo, anteriormente a la aparición de los primeros programas de mindfulness, ya fue muy utilizada para trabajar con los procesos de preocupación excesiva.
Preocuparse, supone hacer un juicio de valor acerca de la experiencia. Estoy anticipando y prestando excesiva atención a las consecuencias negativas sobre algún acontecimiento o hecho. Normalmente esto lo hacemos sin tener en cuenta otros factores más positivos o neutros. Los ejercicios de mindfulness, basados en diferentes tipos de prácticas meditativas, favorecen la marcha de estos pensamientos sin tratar de hacer juicio alguno. Esto impide los círculos viciosos.
Además, la conciencia metacognitiva facilitará que podamos manejar mejor:
- Utilizar la imaginación de forma realista
- Nuestras expectativas y motivaciones
- Desarrollar autoconfianza
Los programas de entrenamiento del Instituto Europeo de Mindfulness, ayudan a desarrollar esta habilidad que es básica, para poder gestionar nuestra forma de pensar y sentir.
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